En casa necesitamos privacidad, aunque sin renunciar a las vistas al exterior siempre que lo necesitemos. Una ventana amplia es garante de la entrada de luz a casa y de buenas vistas -dejando a un lado lo imprescindibles que son la localización y la orientación de la casa-, pero durante el invierno también significa más espacio para que el frío se cuele en la estancia.
Adiós a que las cortinas se arrastren por el suelo: esto es lo que tienes que colocar para no tener que cortarlas
Por esto mismo, las cortinas se convierten en un aliado fundamental para actuar como barrera de las corrientes gélidas. Sin estos tejidos bien colocados protegiendo la casa, nos expondremos mucho más tanto a la mirada de los visitantes como a los cambios de temperatura.
Y es que el paso del tiempo también termina haciéndose notar en nuestras puertas y ventanas. Lo más normal es que las siliconas y las gomas terminen dándose de sí y que por lo tanto no sellen de la misma manera, por lo que cualquier soporte adicional es perfecto para paliar sus carencias si no queremos meternos en un cambio de instalación.
No obstante, en los últimos años ha tomado mucha fuerza una alternativa para las cortinas que viene a cumplir una función muy parecida: los estores. Este artículo, a diferencia de lo que ocurre con las tradicionales cortinas, es enrollable, así que se convierte en una alternativa ideal si queremos evitar la incomodida de tener que colocar el textil de nuevo constantemente. Además, su manera de funcionar es automática y va pegado a la ventana, toda una ventaja si queremos que la tela cubra solo el espacio que ocupa la ventana y ya está.
¿Algo que decir en contra de su funcionamiento? Pues sin duda alguna, cabe destacar un problema con el que la inmensa mayoría de personas que tienen uno de estos en su casa se habrán encontrado: tener que buscar la forma de escalar para volver a bajarlo. Su funcionamiento automático algunas veces se vuelve en nuestra contra y no podemos hacer nada para evitar que se nos escurra y termine atascándose arriba. Una de dos: o tenemos unos brazos muy largos o ya podemos contar con una banqueta cerca para bajarlo de nuevo.
Ikea cuenta con una solución infalible en su catálogo por un precio de 4,99 euros. Se trata de una barra tirador extensible que recibe el nombre de Riktig. Este palo alargado está rematado con un gancho que agarrará el tirador por ti y lo volverá a colocar en su sitio. De esta manera, podrás subir y bajar el estor cómodamente sin un cordón.
¿Estor o cortinas?
Debes tener en cuenta que generalmente los estores son más baratos que las cortinas y que, por lo tanto, son una opción más al alcance de cualquiera. En cuanto a la privacidad, también podrás jugar con sus distintos tipos. Los tienes más opacos, de los que no dejan psar la luz a través de su tejido, aunque también translúcidos, que para dejar pasar la luz son ideales.
Tu elección puede marcar un antes y un después en tu estancia. No se trata solo de una cuestión de comodidad, sino de contar con una opción que estéticamente se integre a la perfección en la decoración de la casa. Quizás una cortina te de mucho más juego en cuanto a colores y abrigue más tu casa de cara al invierno, pero los estores se presentan como una solución sencilla y fácil de montar.