Las cortinas, fabulosos complementos de decoración que decoran las habitaciones y protegen de las miradas indiscretas y la luz del sol. Sin embargo, las telas suelen ser engorrosas y difíciles de planchar. Las arrugas y pliegues son una auténtica pesadilla, así que hay que encontrar la estrategia adecuada para evitar perder tiempo y gastar demasiada energía. Por supuesto, cada tejido tendrá su propio lavado, pero hay algunas reglas básicas que conviene conocer.
Tanto la centrifugadora como la temperatura pueden influir en todo el lavado de las cortinas, por lo que hay que tener mucho cuidado y ajustar el lavado adecuado para cada tejido. La centrifugadora, en particular, aunque está diseñada para escurrir y eliminar toda el agua posible de los tejidos, es un arma de doble filo. Las cortinas, de hecho, se secarán antes, pero es más probable que tengan arrugas molestas que haya que eliminar. En cualquier caso, para lavar y perfumar las cortinas correctamente y sin estropear los tejidos, debemos comprobar siempre la etiqueta de la prenda que queremos lavar. Tampoco son recomendables las altas temperaturas. Si puedes, mejor evita el centrifugado.
Para perfumar los textiles, en cambio, se recomienda una mezcla de agua, ácido cítrico y aceites esenciales. En concreto: vierte 150 gramos de ácido cítrico en un litro de agua fría. A continuación, añada entre 10 y 20 gotas de aceite esencial de su fragancia favorita. Se recomiendan fragancias como limón, lavanda y naranja. De esta forma, evitará comprar suavizantes comerciales y sus cortinas olerán más frescas y limpias que nunca. La regla básica para secar las cortinas sin arrugas es colgarlas en posición vertical inmediatamente después de lavarlas. Alisa las arrugas con las manos y déjalas secar al aire libre. Otro pequeño truco, sobre todo cuando el tiempo lo permite, es montar las cortinas en un palo y dejarlas secar cerca de las ventanas. En el caso de las arrugas, el truco para eliminarlas es verter 700 ml de agua desmineralizada caliente y añadir 2 cucharadas de bicarbonato de sodio. Mezclar, verter en un recipiente con pulverizador y rociar sobre las arrugas. Además de las cortinas, las persianas y los cristales de las ventanas también deben lavarse con cuidado. En estos casos, bastan los remedios adecuados para obtener un resultado óptimo en pocos pasos.
Colocar rollo de papel higiénico en la cortina
Existe otro llamativo truco para reutilizar el rollo de cartón del papel higiénico cuando se acabe.: ponerlo en la barra de la cortina. La razón o puede ser más revolucionaria. La idea (tal y como explica el vídeo que aparece bajo estas líneas) consiste en colocar el cartón en la barra de la que cuelgan las cortinas y así obtendremos un efecto más moderno de separación .