El sincericidio de Germán Martitegui al escuchar el llamativo postre que preparó una participante de MasterChef: «Me da mucho miedo todo esto»

Dispuesta a darlo todo para ganarse un nuevo lugar en MasterChef tras comenzar el repechaje, Micaela Bosio sorprendió a Germán Martitegui al contar qué plato ideó para lucirse frente a él, Donato de Santis y Damián Betular.

Voy a hacer una banana con garrapiñada de maní, y voy a hacer un mousse que va a tener queso brie. Es un postre y queda buenísimo”, detalló Micaela, generando un gesto de asombro en el jurado.

Algo dudoso por esta jugada propuesta, Germán le dio el visto bueno, pero se confesó ante las cámaras en el programa de Telefe: “Una mousse de queso brie con una milanesa de banana y maní… ni yo hubiera llegado a tanto. Algo de acidez y frescura le puede quedar bien. Me da mucho miedo todo esto. Suerte”.

Afortunadamente, la concursante logró superar las expectativas de los chefs, se hizo merecedora del delantal gris y subió al balcón después de haber presentado uno de los platos favoritos de la noche.

¡Felicitaciones!

TREMENDO ENOJO DE GERMÁN MARTITEGUI CON UN PARTICIPANTE DE MASTERCHEF QUE DEJÓ CAER UNA BANDEJA AL PISO

La adrenalina por entregar los platos a tiempo en MasterChef le jugaron una mala pasada a Rodrigo Salcedo quien dejó caer una bandeja con restos de comida al piso sin querer y se ganó el reto de Germán Martitegui.

“¿Qué es esto, Rodrigo? ¿Vos te das cuenta que todo esto es consecuencia del desorden que tenés acá arriba? Ahora, ¿sabés qué? Vas a ordenar y no vas a poder cocinar hasta que no esté todo ordenado”, lanzó el jurado del programa de Telefe, al ver el desorden del concursante.

Tras escucharlo, Rodrigo no ocultó sus nervios: “Perdón, Germán, se me cayó. Sí, me doy cuenta. Ahora voy a ordenar”, atinó a decir. Pero Martitegui redobló la apuesta: “Yo no puedo creer el desastre que tenés acá. Que sea la última vez que trabajás así. ¿Qué son todos esos frascos? ¿Por qué tenés tanta cantidad de cosas y después haces una preparación chiquita?”, indagó, visiblemente molesto”.

“Perdón, Germán. Ahora ordeno bien”, se defendió Salcedo. Y en un sincericidio ante las cámaras y en soledad, cerró: “Yo soy un complicado de la vida, un incomprendido de la vida. Entonces, todo es un lío”.